El consenso es un prerrequisito para la victoria:
el impacto de los medios sociales y la percepción del riesgo en las medidas antiepidémicas
Artículo de revisión basado en La exposición a los medios de comunicación y la percepción del riesgo como predictores de la participación en las conductas de prevención de COVID-19: ampliación de la teoría de la acción planificada a dos culturas
Xuechen Hu, Máster en Periodismo de Datos, Universidad de Columbia; Xingjian Gao, Máster en Educación y Desarrollo Humano, Universidad de Nagoya; Wenzhen Xiu, Instituto de Investigación de la Ciudad de Fujimino; Jiro Takai, catedrático de Psicología Social, Universidad de Nagoya
La respuesta al COVID-19 ha variado mucho de un país a otro en todo el mundo; algunos países han sufrido la enfermedad y otros han logrado contener la propagación de la epidemia. Los factores que contribuyen a estas diferencias no sólo consisten en el control gubernamental, sino también en la cultura, un factor importante que influye en la gente para tomar precauciones contra la epidemia. Los investigadores observaron que, en los Estados Unidos y Japón, dos democracias muy desarrolladas, la proporción de personas infectadas en la población y el número de nuevas muertes diferían significativamente, a pesar de que la elección de seguir o no, las normas de prevención de epidemias se dejaban en gran medida en manos de la población. Como resultado, los investigadores desarrollaron un modelo de predicción del compromiso individual en el comportamiento de prevención de COVID-19 basado en la Teoría del Comportamiento Planificado (TPB), la cual examina los factores psicológicos y sociales que influyen en la realización del comportamiento de prevención de COVID-19. El modelo analizó la influencia de los factores culturales que contribuyen a las diferencias en los resultados de la resistencia, centrándose en la exposición a los medios de comunicación y la participación en las redes sociales (SNS).
Los resultados muestran que el modelo tiene un alto ajuste en ambas culturas. La exposición a los medios de comunicación fue un importante factor de predicción de la percepción del riesgo en ambas culturas, mientras que la participación en los medios sociales sólo fue un factor de predicción de la intención japonesa de adoptar conductas preventivas. Del mismo modo, la higiene personal resultó ser un predictor significativo de la adopción de conductas preventivas solo entre los japoneses. Y aunque hubo diferencias en las variables que influyen en el comportamiento preventivo, en general, el modelo de acción planificada propuesto por los investigadores demostró ser sólido en ambas culturas. También se pusieron de manifiesto las diferencias en las actitudes hacia la prevención de COVID-19 entre las culturas más unidas y las menos unidas, representadas por Japón y los Estados Unidos.
Basándose en investigaciones anteriores, los autores definen las fuentes de las diferencias culturales que condujeron a las dramáticas diferencias entre los Estados Unidos y Japón en sus respuestas al brote, a lo largo de tres dimensiones: individualismo y colectivismo, culturas unidas y no unidas, y evitación de la incertidumbre y permisividad y restricción. Aunque ambos países son democracias económicamente avanzadas, sus entornos culturales son muy diferentes, y el individualismo que prevalece en EE.UU. puede haber conducido a bajos niveles de cumplimiento de las políticas públicas, así como a una fuerte resistencia a las medidas de prevención de epidemias que violan los derechos individuales. En una cultura suelta construida por una población individualista, sus miembros son más propensos a tomar decisiones por su propia voluntad que a acatar las normas públicas establecidas. La cultura colectivista de Japón, por el contrario, es más probable que anime a su población a cooperar con el gobierno y a adherirse a las normas de precaución. Al mismo tiempo, los estudios han revelado que los japoneses son más resistentes a la incertidumbre, lo que significa que son más propensos a ejercer la libertad personal con moderación para evitar el riesgo, mientras que los estadounidenses no son tan resistentes a la incertidumbre de contraer una enfermedad.
En respuesta a las críticas de algunos estudiosos sobre el poder explicativo del modelo TPB, este artículo destaca la importancia de la forma en que las personas perciben los riesgos para sí mismas y para la sociedad, introduciendo una variable intermedia de percepción del riesgo entre las variables predictoras originales y las intenciones en el Modelo de Acción Planificada, mejorando significativamente la idoneidad del Modelo de Acción Planificada para la salud pública. Los resultados del estudio sugieren que el uso de los medios sociales es un factor importante en el desarrollo de la salud pública, asimismo, muestran que el uso de las redes sociales tiene efectos predictivos contrastados sobre la percepción del riesgo en los Estados Unidos y Japón. Los usuarios de los medios sociales estadounidenses estuvieron expuestos a un gran número de iniciativas de resistencia audaz y de alarde para combatir la epidemia, mientras que los medios sociales japoneses compartieron información sobre los riesgos de la NCC de manera predominante, lo que dio lugar a percepciones de riesgo de la NCC contrastadas para el mismo uso de los medios sociales.
Hay que señalar que este estudio es sólo un estudio transversal de la epidemia de COVID-19, que intercepta un segmento estático del proceso dinámico que estaba teniendo lugar. En el momento del muestreo, las dos culturas se encontraban también en diferentes etapas de la epidemia, y el muestreo en diferentes etapas puede tener algún impacto en el modelo explicativo final, lo que significa que es necesario controlar el momento del muestreo y que la recogida de datos longitudinales a lo largo de la línea de tiempo hará que las afirmaciones finales sean más convincentes. Al mismo tiempo, el diseño de la encuesta, que utilizó un sitio web de crowdsourcing para distribuir el cuestionario, limitó a los encuestados a un grupo de usuarios de Internet, y posiblemente de grandes usuarios de Internet. Además, la información demográfica muestra que las proporciones de género y de títulos universitarios de los encuestados incluidos en esta encuesta también difieren significativamente de las proporciones reales en ambos países. Aunque los investigadores han controlado las características demográficas, una muestra más representativa habría dado a los resultados una imagen más científica y precisa de la realidad.
El uso de los medios sociales requiere más esfuerzo cognitivo y compromiso personal que los medios de comunicación convencionales. Los usuarios buscan y difunden activamente información, discuten temas sociales y proporcionan apoyos emocionales en una esfera pública en tiempo real, altamente interactiva y relativamente sin censura. En el contexto de la epidemia, la alienación social y la regulación de las acciones offline han reducido la posibilidad de comunicación cara a cara, obligando a la gente a recurrir a Internet. En este contexto, las redes de información de los medios sociales pueden influir en las percepciones de los individuos sobre la enfermedad e inculcar creencias sobre la prevención de la misma, y los líderes de opinión establecidos se convierten a menudo en los que la gente confía en determinados momentos. Estas influencias tienen un impacto crucial en la intención y el grado en que los individuos finalmente se comprometen con las medidas de prevención de enfermedades infecciosas.
Sin embargo, no se puede negar que las redes sociales también están llenas de información inexacta y de actitudes inapropiadas a la epidemia, lo que, por un lado, pone a prueba los mecanismos de censura y verificación de las plataformas y la capacidad de filtrado de información de los individuos, y, por otro, crea un dilema de sobrecarga de información en la aceptación selectiva de la información de las redes sociales por parte de los usuarios. El éxito de la lucha contra la epidemia requiere una amplia movilización social y la formación de una sinergia entre toda la sociedad, pero la naturaleza de los medios sociales y de las nuevas plataformas mediáticas hace que sea muy probable que la gente se meta en un capullo informativo sin darse cuenta, lo que crea graves diferencias cognitivas entre ellos y no logra construir un consenso social eficaz. En el contexto de la propagación mundial de la nueva epidemia, diversas culturas e ideologías se ven obligadas a enfrentarse a una prueba común. Este estudio demuestra en cierta medida el papel insustituible de los medios sociales, que trascienden las fronteras físicas y conectan el mundo, en la creación de consenso y el aumento de la participación individual en las acciones de prevención de epidemias, lo que merece la atención y la consideración de los responsables políticos.
Biografía de autor
Rui Wang, estudiante de posgrado de la Escuela de Periodismo y Comunicación en la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghái, estudia la carrera de periodismo, licenciado en filología española de la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghái.
共识是胜利的前提：社会媒体和风险感知对疫情应对举措的影响
基于《媒体暴露与风险感知作为预测COVID—19预防行为参与度的因子：将计划行动理论拓展至两种文化》的评论文章
Xuechen Hu, 哥伦比亚大学数据新闻专业硕士；Xingjian Gao, 名古屋大学教育和人类发展学硕士；Wenzhen Xiu, 富士见野市研究院；Jiro Takai, 名古屋大学社会心理学教授
世界各国对COVID-19的反应大不相同，有些国家深受其害，而有些国家则成功地遏制了疫情蔓延。导致如此差异的因素除了政府管控外，文化也是影响人们采取防疫措施的重要因素。研究者注意到在美国和日本这两个高度发达的民主国家中，尽管是否遵循防疫规章制度的选择权都很大程度上交给了民众，但是两国在感染者占总人口的比例和新冠致死病例人数上却大相径庭。由此，研究者建立了一个基于计划行为理论（TPB）的个人参与COVID-19预防行为的预测模型，研究了影响COVID-19预防行为表现的心理和社会因素。该模型通过着重考察媒体接触和社交网站（SNS）参与度，分析了造成抗疫结果差异的文化因素影响。
调查结果显示该模型在两种文化中都有较高的拟合度。在两种文化中，媒体接触都是风险认知的主要预测因素，而社交媒体参与度只对日本人的预防行为意向起到了预测作用。同样的，个人卫生也被发现只是日本人采取预防行为的一个重要预测因素。而虽然影响预防行为的变量存在差异，但总的来说，研究者提出的计划行动模型在两种文化中都被证明是稳健的。以日本和美国为代表的紧密型和松散型文化之间在COVID-19预防态度方面的差异也被揭示出来。
作者结合以往研究，从个人主义和集体主义、紧密型文化和松散型文化以及不确定性规避和放纵、克制三个维度定义了导致美国与日本在应对疫情结果方面出现巨大差异的文化差异根源。虽然两国都是经济十分发达的民主社会，但是两国的文化环境差异巨大，美国盛行的个人主义可能会导致民众对公共政策的低服从度，同时也导致了对“侵犯个人权益”的防疫措施的强烈抵制。而在由奉行个人主义的民众构建起来的“松散的文化”中，其成员更倾向于按照自己的意志做出决定，而非遵守既定的公共准则。而日本的集体主义文化土壤则更可能促使其民众与政府通力合作并遵守预防准则。同时，已有研究发现日本人对不确定性的抵触程度更高，这就意味着日本人更愿意在行使个人自由的过程中做出克制以避免风险，而美国人对“感染疾病”这一不确定性事件则不会抱有同样强烈的抵触情绪。
为了应对一些学者对TPB模型解释能力不足的批评，这篇文章通过在计划行动模型原有的预测变量和意图之间引入“风险感知”这一中间变量，强调了人们如何看待自身和社会风险的重要性，显著提高了计划行动模型在公共卫生领域的适配度。研究结果表明，社交媒体使用在美国和日本对风险感知的预测效果截然相反。美国社交媒体用户接触到大量的“大胆反抗新冠”和炫耀性质的抗疫举措，而日本社交媒体上则主要分享新冠风险信息，造成双方同样使用社交媒体的情况下却形成了对新冠截然相反的风险认识。
需要注意的是，这篇研究仅是对COVID-19流行病的一次横断面调查，只截取了正在发生的动态过程中的一个静态片段。两种文化在取样时也处在疫情的不同阶段，而在不同阶段的取样或对最终的解释模型造成一定影响。也就是说，有必要对采样时间进行控制，并且沿时间轴的纵向数据收集会令最终的主张更具说服力。同时，本次调查采取众包网站发放问卷的设计将受调者局限在了互联网用户，且可能是重度互联网用户的群体中。此外人口信息显示本次调查覆盖的受调者中性别和本科学历比例也和两国的真实比例有较大出入。尽管研究者对人口统计学特征进行了控制，但更有代表性的抽样会让研究结果对现实情况的描述更为科学和准确。
较之于主流媒体，社交媒体的使用需要更多的认知努力和个人承诺。用户在实时的、高度互动的和审查相对较少的公共领域积极的搜索和传播信息、讨论社会问题和提供情感支持。在疫情背景下，社会疏远和线下行动管制削减了面对面交流的可能，迫使人们转向线上。这种情况下，社交媒体的信息网可以影响个人对疾病的认识，灌输预防疾病的信念，成熟的意见领袖也往往会成为人们在特殊时期依赖的对象。这些影响对个人最终参与传染病预防措施的意向和程度有着至关重要的影响。
但是不可否认的是，社交媒体中同样充斥着大量的不实信息和对疫情的不当应对理念，这一方面对平台的审核机制和个人的信息甄别能力提出了考验，另一方面也造成了个人在选择性接受社交媒体信息过程中面临着“信息过载”的困境。抗疫的成功需要广泛的社会动员，形成整个社会面的合力，而社交媒体和新媒体平台的特性使得人们很大概率置身于信息茧房之中而不自知，彼此之间形成严重的认知差异，而无法有效地凝聚社会共识。新冠疫情全球蔓延的大背景下，各异的文化和意识形态被迫面临着共同的考验。虽然目前各国面对疫情的态度和应对方式各有不同，但是构建共同的风险感知无疑是采取共同行动的前提，而这篇研究一定程度上说明了跨越物理边界、联通世界的社交媒体在凝聚共识，增加个人预防疫情行动参与度上发挥着不可替代的作用，这值得政策制定者们的重视和进一步思考。
本文作者介绍：
王睿，上海外国语大学新闻传播学院研究生在读，新闻学专业。本科毕业于上海外国语大学，西班牙语专业。